martes, 20 de abril de 2010

lunes, 19 de abril de 2010

Arte Argentino

De los artistas de Argentina el que más me gusto fue Lino Spilimbergo.
El es un artista postulado de cambio social que adoptaron algunos vanguardias, que transmitió momentos cuasi surrealistas; un artista independiente.
Para los surrealistas la obra nace del automatismo puro, es decir, cualquier forma de expresión en la que la mente no ejerza ningún tipo de control. Intentan plasmar por medio de formas abstractas o figurativas simbólicas las imágenes de la realidad más profunda del ser humano, el subconsciente y el mundo de los sueños. Para lo que utilizan recursos como: animación de lo inanimado, aislamiento de fragmentos anatómicos, elementos incongruentes, metamorfosis, máquinas fantásticas, relaciones entre desnudos y maquinaria, evocación del caos, representación de autómatas, de espasmos y de perspectivas vacías. El pensamiento oculto y prohibido será una fuente de inspiración, en el erotismo descubren realidades oníricas, y el sexo será tratado de forma impúdica.
A mi me gusto porque expresa el subconsciente del hombre, que si bien no es un pensamiento que no llega a ser consciente, pero también no deja de tener características vanguardistas, que buscaba la innovación en la producción artística; se destaca por la renovación radical en la forma y el contenido; explora la relación entre arte y la vida; y busca reinventar el arte confrontando movimientos artísticos anteriores; es decir la libertad de expresión, que se manifiesta alterando la estructura de las obras, abordando temas tabú y desordenando los parámetros creativos.
En síntesis mezcla movimiento artísticos, el surrealismo con movimientos vanguardistas, y es por eso que me gusta, la mezcla de varios movimientos formando un tipo de arte (pintura, escultura, etc.)
Como observación personal del video de YouTube, Spilimbergo pinta paisajes y personas, pero la mayoritaria de las personas son mujeres, desnudas o con ropa, y en algunos paisajes aparecen como protagonista las mujeres

Biografía de Lino Spilimbergo
Nace en Buenos Aires, el 12 de agosto de 1896. En 1899 su madre lo lleva a Italia junto a uno de sus hermanos. De regreso a Buenos Aires, en 1902, inicia sus estudios. Luego de una primera formación industrial, al tiempo que trabaja en diversos empleos, en 1915 ingresa en la Academia Nacional de Bellas Artes. Allí tiene como compañeros a Héctor Basaldúa, Aquiles Badi, Horacio Butler y Alfredo Bigatti. Egresa en 1917 con el título de Profesor Nacional de Dibujo.
Después de recibirse en la Academia Nacional de Bellas Artes en 1917, Lino Enea Spilimbergo se afinca en la ciudad de San Juan, en el Noroeste argentino, donde hace su primera muestra en 1921. Obtiene, el año siguiente, 1922, el Premio de Grabado del XI Salón Nacional; y más tarde, en 1925, viaja a Europa. Luego de recorrer ciudades de Alemania y de Italia, recala en París y allí toma clases con André Lhote, que infunde en él las orientaciones derivadas del Cubismo. Vuelve a nuestro país en 1929, y se consagra desde entonces a la elaboración de una obra de alto poder creativo y a la enseñanza. Organiza y dirige el Instituto Superior de Arte de la Universidad Nacional de Tucumán (1948-52).
Dibujante excepcional, Spilimbergo se acercó al Arte político, aunque fue siempre un pintor independiente, salvo del destino de su país y de sus conciudadanos. Uno de los descubrimientos de Lino Enea Spilimbergo, durante su paso por Italia, fue el de la Escuela Veneciana del siglo XV; pero también incidirán en su pintura las enseñanzas cubistas impartidas por Lhote y el arte metafísico de Giorgio de Chirico (1910-20), que los surrealistas consideraron como un claro antecedente de sus teorías. La serie de las Terrazas (1930-34), a la cual pertenece la obra de Spilimbergo, tiene afinidades con los inmóviles y enigmáticos paisajes urbanos de Chirico, aunque, sin duda, la clave es distinta. Más que adentrarse en interna en el espacio humano del misterio, Spilimbergo se interna en el misterio del espacio pictórico: de ahí la yuxtaposición de planos, la figuración entrecortada, el recurso de la geometría y la tendencia arquitectónica de la composición.
Cuando de temática social se trata trabaja óleos con figuras monumentales que evocan la estética del mural. Cuando estos temas pasan al grabado la mirada se agudiza creando notables síntesis lineales como en la serie de los políticos, por ejemplo. Lo metafísico y lo surreal también forman parte de su capital plástico: el óleo La Planchadora (1936) y los grabados que ilustran el texto de Oliverio Girondo Interlunio (1937) dan cuenta de esto.
El muralismo no sólo es una evocación poética en la obra de Spilimbergo, también es una concreción. Realizó junto al muralista Mexicano David Alfaro Siqueiros y a los argentinos Berni y Lozano el mural Ejército Plástico (1933) en la quinta del director del diario Crítica Natalio Botana; junto a Castagnino, Berni y Urruchúa pintó el conjunto mural de las Galerías Pacífico (1946).
La actividad docente formó también parte de su vida. Los años cuarenta lo encuentran desarrollando una notable experiencia de enseñanza que acabará con la organización y dirección del Taller de Pintura del Instituto Superior de Artes de la Universidad de Tucumán (1948). Se jubiló en 1952, sin embargo no abandonó nunca su actividad como artista plástico. Continuó produciendo y participando en exposiciones nacionales e internacionales, entre estas últimas: la Bienal de Venecia, Pintura Argentina en Nueva York, Helsinki, Brasil, Montevideo, y China.
Muere en Unquillo, Córdoba, el 16 de marzo de 1964. Poseen obras suyas museos nacionales y extranjeros así como importantes coleccionistas de arte argentino y latinoamericano.

Anexos:
• Apunte
• http://www.arteespana.com/surrealismo.htm
• http://es.wikipedia.org/wiki/Vanguardismo
• http://www.todo-argentina.net/biografias/Personajes/lino_enea_spilimbergo.htm

Expresionismo

El expresionismo es un movimiento que surge como reacción al impresionismo; se desarrolla principalmente en Alemania en el primer tercio del siglo XX; (desde 1905 hasta finales de la década de 1920), por lo cual sufre el tremendo impacto de la primera guerra mundial.
Su principal característica es la primacía de lo subjetivo, fantástico, deforme e irracional.
El Expresionismo es una corriente artística que busca la expresión de los sentimientos y las emociones del autor más que la representación de la realidad objetiva.
Revela el lado pesimista de la vida generado por las circunstancias históricas del momento. La cara oculta de la modernización, la alineación, el aislamiento, la masificación, se hizo patente en las grandes ciudades y los artistas, creyeron que debían captar los sentimientos más íntimos del ser humano. La angustia existencial es el principal motor de su estética.
El fin es potenciar el impacto emocional del espectador distorsionando y exagerando los temas. Representan las emociones sin preocuparse de la realidad externa, sino de la naturaleza interna y de las impresiones que despierta en el observador. La fuerza psicológica y expresiva se plasma a través de los colores fuertes y puros, las formas retorcidas y la composición agresiva. No importa ni la luz ni la perspectiva, que se altera intencionadamente.
La obra de arte expresionista presenta una escena dramática, una tragedia interior. De aquí que los personajes que aparecen más que seres humanos concretos reproduzcan tipos. El primitivismo de las esculturas y máscaras de África y Oceanía también supuso para los artistas una gran fuente de inspiración.

Anexo:
• http://www.oni.escuelas.edu.ar/olimpi97/pintura-argentina-sigloxx/expresionismo.html
• http://www.arteespana.com/expresionismo.htm

Postimpresionismo

El término postimpresionismo se aplica a los estilos pictóricos de finales del siglo XIX y principios del XX tras el impresionismo.
El postimpresionismo era tanto una extensión del impresionismo como un rechazo a sus limitaciones. Los postimpresionistas continuaron utilizando colores vivos, una aplicación compacta de la pintura, pinceladas distinguibles y temas de la vida real, pero intentaron llevar más emoción y expresión a su pintura.
Con el postimpresionismo se creó un nuevo tipo de artista, el genio individual que vive de su arte, la personalidad creadora que plasma su psicología en el cuadro, gracias a su trazo singular, al color personal, y a la recuperación de las formas y las estructuras, pero con una nueva lectura. El color se hace representativo y subjetivo, no objetivo. Se representa el color con que se ve el alma de las cosas. La realidad se interpreta según la visión personal del genio creador. Los pintores huyen de París buscando el primitivismo del arte, aunque esta ciudad sigue siendo el centro del arte mundial. Estos nuevos impresionistas tienen una visión particular de su pintura, que les aleja del impresionismo clásico.

Anexo:
• http://enciclopedia.us.es/index.php/Postimpresionismo

Neoimpresionismo

El neoimpresionismo significa descomposición prismática de los colores y su mezcla a través del ojo del espectador, a la cual va unido el respeto por las leyes eternas del arte: ritmo, simetría, contraste. Este modo de pintar es la consecuencia necesaria del impresionismo. Así como la técnica de los impresionistas es instintiva y fugaz, en igual medida la de los neoimpresionistas es meditado y constante. Tal como los impresionistas usan en su paleta colores puros, pero bajo ningún concepto admiten una mezcla en la paleta, salvo la mezcla de colores vecinos en el círculo, estos, matizados entre sí, y aclarados con el blanco, engendra la multiplicidad de los colores del prisma y todas sus graduaciones. Merced al empleo de trazos aislados de pincel -cuyo tamaño mantiene una correcta proporción con el tamaño de todo el cuadro-, los colores se mezclan en el ojo del espectador, si éste se coloca a la debida distancia. No hay otro medio para detener satisfactoriamente el juego y el choque de elementos contrastantes: la justa cantidad de rojo, por ejemplo, que se encuentra en la sombra de un verde, o el efecto de una luz naranja sobre un color local azul o bien, a la inversa, el de una sombra azul sobre un color local anaranjado. Si estos elementos se combinan de otra manera, y no por mezcla óptica, lo que se obtiene es un color sucio.
El objeto de la descomposición de los colores es conferir al color el mayor esplendor posible, crear en el ojo -mediante la mezcla de las partículas de color yuxtapuestas- una luz coloreada, el brillo de la luz y los colores de la naturaleza. De esta fuente de toda belleza, tornamos nosotros las partes fundamentales de nuestras obras, pero el artista debe seleccionar esos elementos. Un cuadro de líneas, y colores, compuesto por un artista genuino, representa una plasmación más mediata que la copia de la naturaleza tal y como nos la ofrece la casualidad. La técnica de descomposición de los colores asegura precisamente a la otra, una armonía cabal -divina proportione-, merced a la correcta distribución y exacto equilibrio de aquellos elementos, y según las reglas del efecto de contraste, gradación e irradiación. Los neoimpresionistas aplican estas reglas -que los impresionistas solo observaron aquí y allá y por instinto- en la forma más constante y estricta. Los neoimpresionistas no atribuyen importancia a la forma de la pincelada, puesto que no les sirve como medio expresivo del modelado, del sentimiento o de la imitación de la forma de un objeto. Para ellos, la pincelada no es más que una de las innumerables partes que, en conjunto, componen el cuadro; un elemento que desempeña el mismo papel que la nota en una sinfonía. Sensaciones tristes o jubilosas, estados de ánimo apacible o agitado no se expresan ya a través del virtuosismo de la pincelada, sino mediante la correlación de líneas, colores y tonos. El arte de los coloristas está evidentemente asociado, en cierto sentido, tanto con la matemática como con la música. Frente a una tela todavía intacta, el pintor debería determinar ante todo cuáles son los efectos de líneas y superficies que la cruzan, cuáles los colores y tonos que deberían cubrirla. La descomposición de los colores es un sistema que busca aronía, es más una estética que una técnica.

Anexo:
• http://es.wikipedia.org/wiki/Neoimpresionistas

Impresionismo

El Impresionismo es un movimiento pictórico que surge en Francia a finales del S. XIX en contra de las fórmulas artísticas impuestas por la Academia Francesa de Bellas Artes, que fijaba los modelos a seguir y patrocinaba las exposiciones oficiales en el Salón parisino.
El objetivo de los impresionistas era conseguir una representación del mundo espontánea y directa.
El Impresionismo parten del análisis de la realidad. Hasta ahora la pintura reproducía un escenario en el que ocurría un acontecimiento que conformaba el mensaje para el espectador. Ahora, se quiere que la obra reproduzca la percepción visual del autor en un momento determinado, la luz y el color real que emana de la naturaleza en el instante en el que el artista lo contempla. Se centrarán en los efectos que produce la luz natural sobre los objetos y no en la representación exacta de sus formas ya que la luz tiende a difuminar los contornos. Ven colores que conforman cosas, y esto es lo que plasman, formas compuestas por colores que varían en función de las condiciones atmosféricas y de la intensidad de la luz. Todo esto hace que elaboren una serie de un mismo objeto en diferentes circunstancias atmosféricas y temporales, no les importa el objeto, sino las variaciones cromáticas que sufre éste a lo largo del día.
Los impresionistas eliminaron los detalles minuciosos y tan sólo sugirieron las formas, empleando para ello los colores primarios (azul, rojo y amarillo) y los complementarios (naranja, verde y violeta). Consiguieron ofrecer una ilusión de la realidad aplicando directamente sobre el lienzo pinceladas de color cortas.

Anexo:
• http://www.arteespana.com/impresionismo.htm

miércoles, 7 de abril de 2010

Realismo pictórico

El Realismo pictórico, es un movimiento que intenta plasmar objetivamente la realidad. Se extiende a todos los campos de la creación humana aunque tuvo una importancia especial en la literatura. En el caso concreto de las artes plásticas, el realismo consigue la máxima expresión en Francia, casi exactamente, en la mitad del siglo XIX.
El realismo es un término confuso y de muy difícil definición en lo que respecta a las artes plásticas; en general, sólo alude a una cierta actitud del artista frente a la realidad, en la que la plasmación de ésta no tiene que ser necesariamente copia o imitación, aunque sí ajustarse a una cierta visión generalizada.
El objetivo del Realismo era conseguir representar el mundo del momento de una manera verídica, objetiva e imparcial. Por lo tanto, el Realismo no puede idealizar. El manifiesto se basaba en lo siguiente:
• La única fuente de inspiración en el arte es la realidad.
• No admite ningún tipo de belleza preconcebida. La única belleza válida es la que suministra la realidad, y el artista lo que debe hacer es reproducir esta realidad sin embellecerla.
• Cada ser u objeto tiene su belleza peculiar, que es la que debe descubrir el artista.

Anexo
• http://es.wikipedia.org/wiki/Realismo_pict%C3%B3rico

Romanticismo pictórico

Romanticismo pictórico es un amplio movimiento cultural e intelectual, promovido desde Alemania e Inglaterra, se extiende por toda Europa desde finales del siglo XVIII hasta el XIX, rebasando los límites cronológicos establecidos y llegando incluso hasta nuestros días.
El Romanticismo es antes que nada un grito de libertad, su espíritu rebelde lucha contra la corriente racionalista que desdeña todo aquello que no pueda ser controlado y contra el Neoclasicismo que coarta la libre expresión y se opone a la observación de lo real. La naturaleza, de marcado carácter profundo, representa el estado primitivo del hombre y la revelación del misterio inescrutable de Dios. En sus primeras manifestaciones, el romanticismo es un movimiento religioso, que desvela la fe y anhelo de la existencia de un más allá, inherente al alma humana, sin embargo, se evidencia una contracción en su carácter individualista y sentimental, reacio a cualquier disciplina y credo concreto.
Su devoción por los aspectos nacionales y la legitimidad histórica y tradicional de cada pueblo, delatan el carácter pro nacionalista y la ideología liberal del movimiento, que pugna por la promoción de las artes populares, las lenguas locales, y el interés por la historia de cada pueblo.
Estas ideologías y corrientes políticas marcan profundamente el movimiento artístico romántico, cuyas fronteras son difíciles de señalar principalmente en las artes plásticas, debido a la influencia del neoclásico, al que teóricamente se opone con rotundidad.

Anexo:
• http://mundoarte.portalmundos.com/el-romanticismo-tenebrosa-y-sublime-agitacion/